En la aldea
26 diciembre 2024

Atletismo en Venezuela

Desde Horacio Estévez que estableció un nuevo récord mundial de 100 metros en la pista del Estadio Nacional de El Paraíso, en 1964, erigiéndose como el tercer hombre en el mundo en correr los 100 metros planos en 10 segundos exactos; hasta Yulimar Rojas, sin la menor duda, la atleta venezolana de mayores logros en la historia del atletismo criollo.

Lee y comparte
Rafael Arráiz Lucca | 14 julio 2023

Las referencias más antiguas de prácticas atléticas provienen de Egipto, donde no cabe duda de que se organizaban carreras, como lo certifica la inscripción hallada en la tumba de Amenhotep II, que alude a una competencia a pie. Este faraón vivió entre 1438 y 1412 a.C. Luego, los primeros juegos olímpicos reglamentados se ubican en Grecia en el siglo VIII a.C. De hecho, desde entonces quedó establecida la prueba Stadion, que consistía en una carrera de 197,72 metros. Esta extraña cifra correspondía al equivalente de 200 veces el pie de Heracles. De seguidas se diseñó la prueba del Pentatlon, que ya entonces reunía la combinación de carrera, salto, lanzamiento y lucha. Los romanos, en 186 a.C. practicaban el atletismo griego. Luego, durante la Edad Media se practicó el atletismo en Inglaterra, España y en Roma, hasta que en el siglo XIX se instituyeron los primeros Juegos Olímpicos modernos, en 1896, en Atenas, gracias a la iniciativa del barón Pierre de Coubertin. Entre el 5 y el 15 de abril de 1896 tuvo lugar el encuentro.

Al día de hoy las pruebas que forman parte del Atletismo comprenden la gama de las carreras de velocidad, de medio fondo, fondo, obstáculos y relevos. Las marchas (entre 20 y 50 kilómetros). Los saltos son: longitud, triple salto, altura y pértiga. Entre los lanzamientos están: peso, disco, martillo y jabalina. Las pruebas combinadas: pentatlón, heptatlón y decatlón.

¿Cuándo comenzó a practicarse el atletismo en Venezuela? Todo indica que en los comienzos del siglo XX en pistas improvisadas para tal efecto. Luego, ha debido practicarse en el Estadio de Catia, demolido cuando se construyó la Autopista Caracas-La Guaira, el José Pérez Colmenáres y, a partir de 1936, cuando se inaugura el Estadio Nacional en El Paraíso, posteriormente designado Brígido Iriarte.

“Ningún otro venezolano ha saltado más lejos que Yulimar, todo un fenómeno mundial del atletismo”

A las Olimpíadas de 1948 en Londres, sólo asistió un venezolano, el ciclista trujillano Julio César León, de modo que el atletismo para la fecha no participó. Sí lo hará en las Olimpíadas de 1952 en Helsinki, cuando asistieron 38 deportistas practicantes de 8 disciplinas. Fueron 36 hombres y 2 mujeres. Entre ellos destacó el primer venezolano en ganar una medalla olímpica: el zuliano Asnoldo Devonish (1932-1997).

Devonish nació en Maracaibo en 1932 y en los Juegos Bolivarianos de Caracas, en 1951, obtuvo la victoria en Salto Triple, calificándose para integrar la delegación nacional enviada a las Olimpíadas de Helsinki en 1952. Allí obtiene la medalla de bronce en su especialidad, con la marca de 15 metros 32 centímetros. Tenía 20 años y se convirtió en un pionero del medallismo olímpico nacional.

De la generación anterior a Devonish destacó José Tovar (1919), quien fue de los primeros en entrenar en el Estadio Nacional de El Paraíso, inaugurado en 1936, y refaccionado para los Juegos Bolivarianos de 1983; Brígido Iriarte (1921) y Manuel Gómez (1925), todos con destacadas actuaciones, en particular Iriarte. A Devonish le sigue una suerte de Dream Team del Atletismo venezolano, integrado por Héctor Thomas (1938); Rafael Romero Sandrea (1938); John Muñoz (1938); Jimmy Maldonado (1939); Arquímedes Herrera (1938), y Horacio Estévez (1940).

Estos hombres llevaron el atletismo nacional en la década de los años sesenta a una época de oro. Entonces, destacaron en los Juegos Iberoamericanos de Madrid (1962) y en los Panamericanos de Sao Paulo (1963), alcanzando en ambos torneos notables posiciones. Por si fuera poco, Horacio Estévez estableció un nuevo récord mundial de 100 metros en la pista del Estadio Nacional de El Paraíso, en 1964, erigiéndose como el tercer hombre en el mundo en correr los 100 metros planos en 10 segundos exactos. Con buenas razones se ha apuntado que en alguna medida esta promoción de atletas se debió al estímulo que la Shell y la Creole promovieron en sus campos petroleros del Zulia y del oriente del país, donde muchos de estos “superdotados” del atletismo comenzaron a entrenar y competir.

Pero antes de este desarrollo profesional también lo hubo en el ámbito escolar y universitario. Eso refiere Eleazar Díaz Rangel en la entrada sobre deporte en el Diccionario de Historia de Venezuela de la Fundación Polar. Afirma: “Cuando terminaba el año de 1924 y con el propósito de conmemorar el centenario de la batalla de Ayacucho, se presentaron los Juegos Atléticos Interescolares, con estudiantes de la Universidad Central de Venezuela, Escuela Naval, Liceo Caracas, Colegio La Salle, Colegio San Ignacio, Instituto San Pablo y Escuela de Artes y Oficios” (Díaz Rangel, 1997: 75). Trece años después de este encuentro, en 1937, se creaba la Federación Venezolana de Atletismo, hoy ya octogenaria y con una segunda y tercera Medalla Olímpica en su haber: la de Plata de Yulimar Rojas en triple salto en las Olimpíadas de Río de Janeiro, en 2016, y la de Oro en Tokyo en el 2020, de la misma estrella venezolana del atletismo mundial, ambas medallas se suman a la de Bronce de Asnoldo Devonish en Helsinki, en 1952.

Hoy en día la participación femenina se ha incrementado notablemente en esta disciplina deportiva en Venezuela, consecuencia directa de la intensificación de su práctica en el país. Entre aquel Estadio Nacional de El Paraíso de 1936 y los estadios construidos en los 80 años siguientes, ha sido mucho lo que se ha avanzado en el atletismo nacional, y la representación femenina reciente continúa el desempeñó notable que tuvo Marisela Díaz (1956) cuando ganó el maratón de Caracas en 1980, implantando un récord nacional. A partir de entonces fue “Campeona Nacional absoluta en pruebas de fondo durante 20 años” (López Lagonell, 2015:277), y participó en decenas de encuentros deportivos internacionales alcanzando formidables marcas. Fue una pionera.

Recientemente, Robeilys Peinado (1997) destaca en salto con garrocha, en especial cuando obtuvo Medalla de Plata en los Juegos Olímpicos de la Juventud, en China, en 2014. Ganó Medalla de Bronce en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz en 2014 y en 2016 dio un salto de 4,60 metros lo que la ubica en el tercer lugar del mundo en la categoría juvenil de la Federación Internacional de Atletismo. Es mucho lo que puede esperarse de Peinado.

Sin la menor duda, la atleta venezolana de mayores logros en la historia es Yulimar Rojas, nacida en 1995, en Puerto La Cruz, estado Anzoátegui. Ostenta los siguientes títulos:

-Campeonato Suramericano de Atletismo en Perú (2015), Primer Lugar triple salto.

-Campeonato Mundial en pista cubierta en Portland (2016), Primer Lugar triple salto.

 -Campeonato Mundial de Atletismo en Londres (2017), Primer Lugar triple salto.

-Campeonato Mundial de Atletismo en pista cubierta en Birmingham (2018), Primer Lugar triple salto.

-Campeonato Mundial de Atletismo en Doha (2019), Primer Lugar triple salto.

Campeonato Mundial de Atletismo en pista cubierta en Belgrado (2022), Primer Lugar triple salto y, además, Récord Mundial con 15,74 metros.

-Campeonato Mundial de Atletismo en Eugene (2022), Primer Lugar triple salto.

Omito en la lista las medallas olímpicas señaladas antes. Como es evidente, ningún otro venezolano ha saltado más lejos que Yulimar, todo un fenómeno mundial del atletismo.


Bibliografía:
-Díaz Rangel, Eleazar (1997). “Siglos XIX y XX” en Diccionario de Historia de Venezuela. Caracas, Fundación Polar.
-López Lagonell, Alfredo (2015). Los inmortales del deporte en Venezuela. Caracas, Organización Gráficas Capriles.

Lee y comparte
La opinión emitida en este espacio refleja únicamente la de su autor y no compromete la línea editorial de La Gran Aldea.
Más de Contexto