-¿Cuál es el rasgo que define su carácter?
-Reflexivo.
-¿Qué es lo que más valora de sus amigos?
-El corazón grande y bello que tienen.
-¿Cuál es su principal defecto?
-Me complico.
-¿Qué cualidad aprecia más en un hombre?
-La inteligencia.
-¿Qué característica valora más en una mujer?
-El valor.
-¿Cuál es su ideal de felicidad?
-Hace tiempo dejé de esperar por el momento ideal de felicidad, la desmitifico todos los días. Cada vez que mis hijas ríen grandote, es un momento de felicidad; o cuando disfruto de una buena taza de café negro con unas galletas recién horneadas. Descansar frente al mar, en un atardecer maravilloso con buena compañía, también lo es.
-¿Cuál sería su mayor desgracia?
-Creo que ya fue; y la vida me enseñó que, al final, no debemos temerle tanto. Hasta las peores desgracias llegan para transformarnos.
-¿Quién es su autor favorito?
-En este momento es Robin Sharma, unos de los expertos en liderazgo más prestigiosos del mundo.
-¿Cuál es su héroe o heroína de ficción?
-Me encantaba Hechizada, no era la gran heroína; pero resolver todo solo moviendo la nariz, me parecía fantástico.
-¿Su músico favorito?
-Van y vienen, pero siempre está Joan Manuel Serrat.
-¿Su pintor preferido?
-Son muchos y de distintas corrientes o estilos, en este momento me viene a la cabeza el venezolano Fernando Sucre.
-¿Su héroe o heroína de la vida real?
-Venezuela está llena de heroínas, que todos los días dan la vida por sus hijos.
-¿Qué es lo que más detesta?
-La fatuidad.
-¿Un hecho militar que admire?
-La Campaña Admirable.
-¿Una reforma que admire?
-El Concilio Vaticano II, porque implicó un paso importantísimo en la forma como la Iglesia católica se comenzó a vincular con sus fieles. Promulgaron un decreto sobre el derecho de las personas a la libertad religiosa y de conciencia, a partir de ese momento hubo cambios fundamentales, acercamiento y diálogo con otras religiones. Fue un paso gigantesco para adaptar el catolicismo a las necesidades de nuestro tiempo.
-¿Qué virtud desearía poseer?
-La paciencia, porque es la puerta de entrada a la paz interior.
-¿Cómo le gustaría morir?
-¿Gustarme? De ninguna manera. Los vestigios del estrés postraumático en mí, me bloquean ese tema.
-¿Cuál es el estado más común de su ánimo?
-Reflexivo.
-¿Qué defectos en la gente le inspiran indulgencia?
-El perfeccionismo.
-¿Tiene un lema o una máxima?
-Vivir un día a la vez, porque es la mejor fórmula para estar aquí y disfrutar el ahora.
-Si tuviera la oportunidad de viajar en el tiempo y traer de vuelta a una persona, ¿a quién escogería?
-A Vincent van Gogh, me encantaría que se enterara del genio que fue y de cómo valoramos su gran obra.
-¿Qué palabra eliminaría del diccionario?
-Aperturar, porque es horrenda.
-¿Un ídolo?
-¿Te suena extraño si te digo que nunca he tenido un ídolo?
-¿Cuál es su placer culposo?
-Comer masa de galletas cruda.
-¿De qué se arrepiente?
-De no haber agradecido antes.
-¿Un sabor que le recuerde a su infancia?
-Las panquecas de mi mamá.
-¿Una ciudad por la que sienta afecto?
-Santiago de Compostela, porque llegué ahí después de caminar más de 160 kilómetros por parajes hermosos y de recorrer un maravilloso camino espiritual dentro de mi ser.
*La fotografía es cortesía de Anna Vaccarella para el editor de La Gran Aldea.
*Las preguntas pertenecen al “Cuestionario Proust”, una herramienta siempre vigente cada vez que los entrevistadores quieren conocer desde otro punto de vista a los entrevistados.