La abogada Rocío San Miguel le lleva el pulso a los temas de seguridad nacional, defensa y comportamiento de las Fuerzas Armadas en Venezuela. Es una labor que hace desde la organización Asociación Civil Control Ciudadano, que busca promover la discusión pública acerca de esas áreas estratégicas con el fin de que se ejerza la contraloría ciudadana. Es precisamente desde esa posición que sostiene que “la incorporación de militares en actividades y funciones que no son de su competencia abrió la caja de Pandora en Venezuela”.
Ese vicio, que fue exacerbado desde la gestión de Hugo Chávez, hoy coloca al Alto Mando Militar en el ojo del huracán. Aún así, asegura que las Fuerzas Armadas son el centro de gravedad para destrabar la crisis política en el país. De eso están claros los diversos actores que están tratando de facilitar salidas a la crisis venezolana.
“Al poder solo le interesa asegurarse el apoyo de los militares con poder de fuego y capacidad de represión”
Pero si bien al poder solo le interesa asegurarse el apoyo de los militares con poder de fuego y capacidad de represión, no todo es confianza en el círculo que rodea a Nicolás Maduro.
-Una investigación periodística sacó a la luz que en Estados Unidos la esposa y la prima de Vladimir Padrino López manejan un conglomerado de empresas valoradas en millones de dólares. ¿Cómo es esto posible con todas las sanciones y medidas que pesan sobre el Ministro de la Defensa?
-El indictment que el Departamento de Justica ha realizado contra Padrino López es solo una acusación y no una sentencia. A partir de un juicio se determinará si hay consecuencias sobre presuntos bienes que podría tener este oficial o sus familiares en los Estados Unidos. Es prematuro afirmarlo. Corresponderá a las autoridades de los Estados Unidos determinarlo. Por lo demás, no está muy claro el estatus conyugal que se atribuye a Padrino en el artículo.
-La misma investigación refleja qué hay 35 oficiales con empresas que han obtenido beneficios y contrataciones del Estado. ¿Es esto una estrategia para cooptar a los militares o sencillamente los militares aprovechando su poder se han hecho con espacios económicos y empresariales?
-La Ley venezolana es muy clara. Los empleados públicos no pueden contratar con el Estado. De tratarse de militares activos que hayan realizado negocios con el Estado, cometen delito y deben ser procesados penalmente. La cooptación de la lealtad militar ha estado vinculada a muchos factores perversos, y en algunos casos delictivos. La incorporación de militares en actividades y funciones que no son de su competencia abrió la caja de Pandora en Venezuela.
-¿Esta faceta empresarial de los militares es una estrategia de la jerarquía política del madurismo para garantizarse el poder o es pura y simple corrupción?
-La faceta empresarial de los militares no nació en la llamada quinta república. Es un vicio que tiene su origen en el período democrático y que claramente se exacerbó por tres factores: La enorme cuantía de ingresos que llegó a manejar el chavismo, la incorporación de los militares en la gestión del poder económico en Venezuela, y la ausencia de control institucional para vigilarlos.
-¿Cuáles son las primeras consecuencias que han tenido las acusaciones del Departamento de Justicia dentro de la jerarquía militar del madurismo?
-Hasta ahora ninguna. Más consecuencias puede llegar a tener la propuesta de transición realizada por el Departamento de Estado de los Estados Unidos “Marco para la Transición Democrática”, en la que proponen que todo el alto mando militar permanezca en sus cargos durante la transición. Una garantía muy tentadora.
“Hoy los cubanos cogobiernan Venezuela. Intervienen en las decisiones estratégicas de carácter político y militar. De allí que sea muy importante entender cómo actúa Cuba, para bien o para mal”
-Usted señaló hace pocos días que 75% del generalato del país está sancionado. ¿Cuáles son las acusaciones?
-Es correcto, el 75% de los integrantes del Alto Mando Militar tiene sanciones. Actualmente solo permanecen sin sanciones el comandante general del Ejército, mayor general Alexis Rodríguez Cabello, y el comandante general de la Aviación, mayor general Pedro Alberto Juliac Lartiguez. Llama la atención que ninguno de los comandantes de las ocho Regiones Estratégicas de Defensa Integral está sancionado. Eso es una oportunidad de relevo generacional para la Fuerza Armada Nacional en la eventualidad de una transición.
El papel de la Fuerza Armada y la transición
Mucho se ha hablado acerca del rol fundamental de los militares en el necesario proceso de transformación política que demanda Venezuela, en especial en el último año. El tema se discute dentro y fuera de las fronteras del país, por lo que se han hecho propuestas específicas para que este sector dé un paso a favor de la democracia. San Miguel cree que, en efecto, la transición en Venezuela pasa por los militares.
-¿Tiene conocimiento de altos militares que estén tendiendo puentes con los Estados Unidos?
-No.
-¿Qué rol cree usted que juega la Fuerza Armada en el proceso de lograr una transición en el país?
-La transición será decidida por los militares en Venezuela. Que no quepa la menor duda. Son el centro de gravedad para destrabar la crisis política. Ojalá exista conciencia en el liderazgo interno de la Fuerza Armada sobre la importancia de una transición pacífica para la historia de Venezuela.
-¿A quién responde Vladimir Padrino, al madurismo o a Diosdado Cabello?
-A ambos. Es el individuo con mejores relaciones en todo el espectro político y militar del chavismo. Más de 5 años al frente del Ministerio de la Defensa, le permiten una omnipresencia en todo el cuerpo militar, y una estela de relaciones con todo el país.
-¿Es Diosdado Cabello el representante del régimen que más influencia tiene en la Fuerza Armada?
-El individuo con mayor influencia sobre la Fuerza Armada es Nicolás Maduro. Quedó demostrado con las designaciones en julio de 2019, de los dos nuevos comandantes del Ejército y la Guardia Nacional, y seis de los ocho comandantes de las Regiones Estratégicas de Defensa Integral. Ahí Maduro dejó clara su capacidad de adelantar un relevo generacional en la estructura de mando de la organización castrense, sin traumas, manteniendo la lealtad del Alto Mando Militar y mandos con poder de fuego y comando de tropas en todo el país. La promoción de Diosdado Cabello va de salida.
-¿Hay cubanos infiltrados en la Fuerza Armada?, ¿cómo fue ese proceso y quién lo impulsó?
-Los cubanos no necesitan “infiltrarse” en la Fuerza Armada. Tienen la puerta abierta para entrar y salir de las unidades cuando quieren. Este es un largo proceso que se inició muy temprano en el gobierno de Hugo Chávez, quien permitió la injerencia cubana en aspectos sensibles de seguridad y defensa nacional. Hoy los cubanos cogobiernan Venezuela. Intervienen en las decisiones estratégicas de carácter político y militar. De allí que sea muy importante entender cómo actúa Cuba, para bien o para mal.
-Está por cumplirse un año del fracaso del 30 de abril. ¿Cuál es su lectura de lo que ocurrió allí?
-El 30 de abril es todo lo que no debe hacerse para lograr una transición en Venezuela. Por lo menos desde el punto de vista militar.
-El ex jefe del Sebin, Cristopher Figuera, vive en Estados Unidos, ¿cómo hizo? Mucho se ha dicho acerca de que es un doble agente, ¿cuál es su valoración sobre él?
-Desconozco qué información puede haber aportado el general Cristopher Figuera al gobierno de los Estados Unidos. Eso es lo que permitiría determinar si es o no un doble agente. En todo caso habrá pasado por el polígrafo.
“Llama la atención que ninguno de los comandantes de las ocho Regiones Estratégicas de Defensa Integral está sancionado. Eso es una oportunidad de relevo generacional para la Fuerza Armada Nacional en la eventualidad de una transición”
-¿Qué tanto se puede creer en el tema de los dobles agentes?, ¿existen?, ¿el chavismo tiene infiltrado con esos agentes a la oposición?
-Sí, existen. En los últimos años han operado efectivos civiles y militares como “dobles agentes”. Por ejemplo, hay varios casos donde han participado oficiales que son detenidos inicialmente, pero unos quedan presos y otros son premiados inexplicablemente. Los dobles agentes siempre han existido en la Fuerza Armada y en la política. Chávez actuó durante mucho tiempo en Venezuela como doble agente, mientras fue un oficial activo. En este momento incluso podrían llegar a ser un peligro mayor para Maduro, pues podría tener dobles agentes en su entorno.
-¿Qué información maneja sobre el último episodio militar con el general Clíver Alcalá?
-El general Clíver Alcalá huyó hacia adelante cuando se vio cercado. Es nuestra impresión. Para entender en pocas horas, después de un vídeo dramático, que estaba en territorio colombiano y que de no entregarse sería extraditado. Sin duda prefirió colaborar.
-A su juicio, ¿cuáles son las cuatro patas militares que sostienen la mesa del poder en Venezuela?
-General en jefe del Ejército, Vladimir Padrino López; almirante en jefe Remigio Ceballos Ichaso; mayor general del Ejército, Iván Rafael Hernández Dala, y mayor general Néstor Luis Reverol Torres.
-¿Cuál es su valoración sobre la estrategia y el discurso que el Gobierno interino ha tenido hacia la Fuerza Armada?
-Es necesario construir por parte de quien aspire ser una alternativa real de poder en Venezuela, un marco de garantías creíbles para los militares que decidan acompañar una transición. Eso no existe hasta ahora.
-¿Hay forma de saber cuánto es el porcentaje de la Fuerza Armada que apoya a Maduro?
-Los números de repudio o apoyo son importantes en las democracias, porque influyen sobre la conducta de los gobernantes. En los autoritarismos hegemónicos, como es el caso de Venezuela, esos porcentajes no importan. Al poder solo le interesa asegurarse el apoyo de los militares con poder de fuego y capacidad de represión.
-¿Los militares de este país ven futuro más allá del madurismo?
-Sí. En los militares es natural el relevo del mando. Solo existe un militar activo que sobrepasa los 60 años en Venezuela: El general en jefe Jacinto Pérez Arcay, y no tiene ni mando ni poder de fuego.